El pasado domingo apareció Ramón Valencia en el programa de Clarín de RNE. Y dejó unas cuantas perlas para analizar.
Dijo estar «bastante satisfecho» con el abono que han organizado. Yo me pregunto , si es el mejor que se puede hacer ¿Por qué sólo bastante satisfecho? Porque ni ellos se creen que sean las mejores combinaciones posibles.
Afirmó que las entradas sólo suben por el cambio en el tipo del iva. Los abonos son más baratos por el simple hecho de que hay una corrida menos y, como aquí el abono no es más que la suma de los precios de las entradas individuales, sin descuento de ningún tipo, no les quedaba otra. Pedir una rebaja en Sevilla es utópico así es que bienvenido sea, al menos, que los mantengan.
La ausencia de más toreros sevillanos y de Macías, se sustenta en que hay dos corridas menos. En el caso de los primeros, tendrán el 15 de agosto. Un gran premio, sí señor. Cuestionado por la ganadería de Cuadri, comentó que cuando el ganadero tenga una corrida de garantías, avisará y volverá a Sevilla. Al hilo de la corrida del Domingo de Resurrección dijo que 2 orejas salvan cualquier corrida. ¡Cuánta sabiduría!
Dejo para el final lo que más me llamó la atención, fue gracias a una gran pregunta que le hizo Carlos Crivell. Cuestionado sobre qué echaba de menos, como aficionado, respondió que «nada». Echando una ojeada a los carteles sólo se puede decir una cosa: ¡qué mal aficionado tiene La Maestranza como empresario!
Gracias por vuestro tiempo.
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